El intercambio con los chicos y chicas de Alençon es la mayor experiencia de toda mi vida y que jamás olvidaré. Son un cúmulo de recuerdos que es imposible de olvidar. He tenido el privilegio de poder participar en este viaje espectacular que tan bien lo han organizado nuestros profesores. Y digo que he tenido "el privilegio" porque he conocido nuevas maneras de convivir, las costumbres que tenían a la hora de comer, organizarse o el "día día" de los franceses, pero al margen de eso, sobre todo las personas que hemos conocido y los amigos que hemos hecho para siempre.. No hay palabras para explicar el intercambio, la única manera de entenderlo es viviéndolo. Solo quiero decir gracias y... volveremos a verles, eso sin duda. También le doy las gracias a Mariló por su esfuerzo y por invitarnos a pasar esta semana inolvidable. Gracias principalmente a ella hemos conocido y hemos pasado estas dos semanas fantásticas e irrepetibles con los franceses.
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